¿Dónde está el error?, ¿porque me equivoqué?, ¿cuál justificación le encuentro a mis actos...?. Pues no hay ninguna explicación pues hago lo que puedo con las herramientas que tengo y aunque estoy rota de nuevo yo no tengo que disculparme con nadie por como intento autorepararme, no tengo porque explicarle a nadie lo que pasa por mi mente cuándo siento correr la sangre de mis heridas, cuándo estoy devastada en una habitación a solas y oscura ahogada en mis lágrimas dibujando en mi cuerpo oscuras marcas de dolor, me resisto a sentirme culpable por intentar sobrevivir y aunque actúe de forma errada tengo que decir que no me siento condenada por ello, porque no elegí las tragedias de mi existencia yo solo las vivo, las interiorizo, las superó y me impulso para comenzar de nuevo. Y aunque creáis que por ello no puedo derrumbarme te equivocas porque aunque mi ser cada día es más fuerte sigo siendo un perfecto humano que se rinde ante el dolor con el que el universo abraza su alma y que se da permiso para apagarse y reiniciar tanto como sea necesario su ser y aquí vamos de nuevo hasta reparar mi alma en su pura esencia, hasta recuperar esa energía intensa que me hace vivir y hasta entonces seré yo cometiendo mil errores.
